01 julio 2011

Buenas Ideas para Cambiar TU Ruta y Bajar de Peso

Uno de los principales ingredientes del éxito es mantener la mente abierta para recibir respuestas. 
Pensar en adelgazar o empezar a ir al gimnasio, sugiere a muchos la idea de un trabajo duro, una sucesión interminable de dieta, ejercicio, privaciones... Pero se puede modificar la actitud con que se enfrentan los cambios, y en vez de embarcarse en una lucha sin cuartel, comprometerse con un estilo de vida saludable. Entender esta diferencia implica un "clic", una especie de "flash", ese momento en el que de pronto encajan todas las piezas de un rompecabezas.
Muchas personas a las que creemos "triunfadoras", que nos parece que nacieron con la disciplina y los hábitos saludables incorporados, han pasado situaciones difíciles. ¿Qué los impulsó en su camino hacia el éxito? No es raro que cuenten que en algún momento escucharon, sintieron, o soñaron algo que actuó como disparador, que despertó su deseo y energía para actuar y alcanzar su objetivo.

Hacer este "clic" generalmente requiere etapas de preparación, reflexión y hasta frustración, y sólo luego de ello aparece el camino adecuado. 
Angela (40) lo cuenta así: "Yo engordé y adelgacé muchísimas veces, hice todas las dietas que encontré. Y siempre me sentía perdedora. Un día pasé delante de una vidriera y ví una gorda mujer enfrente. Me dí cuenta de que usaba el mismo vestido que yo. Era yo! Me sentí como si me hubiera quedado sin sangre en el cuerpo. Pero ese momento fue mi "clic". Fui a casa a comerme todo. Después, otro día al despertarme pensé: "Toda la vida he hecho lo mismo. ¿Seguiré para siempre así?" Una profunda sensación de aceptación me invadió, y me sentí una persona gorda en pie, luchando... Fue la primera vez que dejé de recriminarme y me perdoné. Eso me motivó para buscar ayuda. Perdonarme fue mi "clic"."
Experiencias como ésta son más comunes de lo que parece. De todas maneras, no es posible quedarse sentado esperando a que se produzca el cambio: hay que hacer que surja. Veamos algunas estrategias para su búsqueda. Es importante no prejuzgar cuáles van a funcionar. Utilice la intuición y elija aquellas con las que se siente más cómodo. Se pueden reciclar tácticas que ya se intentaron, especialmente si dieron pie a otros cambios. También se pueden combinar con nuevas ideas que nunca se pensó utilizar. Lo importante: no descalificarse por estrategias que antes no funcionaron. Todavía se puede contar con ellas. 
El comienzo
Cuando se desea mejorar el estado físico o bajar de peso, la alimentación saludable y el ejercicio evidentemente ayudarán a mejorar y afianzar hábitos saludables mientras se trabaja en la búsqueda de otros disparadores del "clic".
Las ideas o caminos que se proponen a continuación se pueden implementar de a uno. A medida que se avanza se agregan o restan otras, tomando en cuenta lo que funciona mejor para cada uno.
• El intercambio. Compartir el problema con otras personas que lo entienden y buscan los mismos cambios con el objetivo de bajar de peso. Esto puede motivar e inspirarlo; saber que no se está solo es de gran ayuda. Hable con amigos, asista a un grupo, a charlas sobre salud, inicie un programa para adelgazar, no es imprescindible tener una actitud decidida, tampoco hay que esperar resultados enseguida. Puede suceder que en la reunión número 50 con su grupo surja el "clic". 
• El camino intelectual. Si es un buscador continuo de información puede comenzar leyendo artículos sobre salud, coleccionar folletos, leer las etiquetas de los alimentos, escuchar la radio, ver un programa de salud en la TV, investigando un plan de salud. A medida que se obtiene información sobre nutrición, ejercicio o un estilo de vida sano, se acerca al momento clave. 
• El camino del cuerpo. Hacer algo con el cuerpo puede ser un deporte o clases en un gimnasio, pero también puede ser limpiar la casa, bañar el perro, pintar el cuarto, bailar... La idea es dejar de pensar sobre el problema e involucrarse con el cuerpo el tiempo suficiente para que la mente baje la guardia y se levanten las barreras. Esto puede permitir que el pensamiento que favorece el "clic" lo haga visible. 
• El camino del silencio.Cualquier recurso que se utilice para silenciar la "charla mental" (meditación, relajación, visualización creativa, e incluso baños de inmersión) permitirá que "esa pequeña voz interior" se haga oír. La sabiduría china cuenta con una frase que refleja esto claramente "Si estás en silencio hablará, si hablas se mantendrá en silencio". 
• El camino contrario. A veces nos decimos tanto "tengo que adelgazar" que quedamos congelados, inmovilizados, no vemos más allá de nuestras narices. En esos momentos tal vez sea bueno liberarse haciendo algo que no tenga nada que ver con nuestro objetivo. Este enfoque de lo "opuesto" nos permite dejar de resistirnos al problema u obstáculo. Hay un momento para todo: paradójicamente, cuando aceptamos ciertas cosas que no se pueden cambiar se produce el cambio. Es entonces cuando se comienza a modificar aquellos hábitos y circunstancias en las que sí se puede trabajar. 
• Tocar fondo. Muchas veces es el inicio para salir de un problema. ¿Quién no sintió alguna vez que deseaba llorar hasta agotar las lágrimas antes de recomponer su ánimo para seguir adelante? 
Señales de claridad
Lo más importante de este trabajo de reconocimiento es saber que no se trata de correr tras un programa de ejercicio o una dieta con resultados inmediatos, sino de encontrar un estilo de vida saludable.
Las señales que indican que se está encaminado hacia su logro son más energía, una postura corporal más erguida, mayor asertividad. Físicamente, la sensación es de mayor libertad. Se deja de dar excusas y de culpar a otros por la situación. Comienza el crecimiento. 
El mantenimiento
La fase de mantenimiento implica continuar actuando y practicar los mismos recursos que contribuyeron a que se produzca el "clic". Por ejemplo, si se utilizó el recurso de la información y lectura de temas de salud y nutrición, un curso de cocina de bajas calorías, y el baile junto con un grupo de autoayuda, prosiga con estas actividades.
Si, en cambio, las modificaciones realizadas fueron pocas, implemente pequeños nuevos cambios para crear una sensación de novedad. No se detenga sólo porque haya logrado perder peso y mejorar su cuerpo.
El "clic" no significa un adelgazamiento fácil. Lo que habremos aprendido es que, aunque no sea fácil, se puede y vale la pena hacerlo. Aunque haya aprendido a perdonarse hay que seguir actuando.
Si en algún momento se produce una recaída, en lugar de perder el control y el tiempo en recriminaciones, reflexione sobre lo que hizo mal y considérelo simplemente como una piedra con la que tropezó en su camino hacia el éxito.
La clave es ponerse en acción, aunque no sea la correcta. No importa qué aspecto de tú vida deseas cambiar --puedes utilizar estas estrategias para cualquier cosa---, sólo hay que elegir alguno de los caminos propuestos... Quién sabe... tal vez alguien, tal vez tú, hayas encontrado TU disparador sólo al poner tu atención en estas líneas.
Fuente: Dr. Cormillot